Cuando Mercedes y Carlos contactaron con nosotras, su salón era un espacio sobrio y poco acogedor. Le faltaba la esencia de la familia que convierte una casa en un hogar.
Durante los años anteriores, habían vivido en casas de alquiler, por lo que su salón era una mezcla interesante de muebles de distintos estilos, formas y colores que habían acumulado durante esos años.
Tras hacer un estudio en profundidad del espacio, sus necesidades, sus imprescindibles y sus gustos y deseos, fijamos los conceptos clave del proyecto: ELEGANCIA CONTEMPORÁNEA + FUNCIONALIDAD + FAMILIA.
En primer lugar, fijamos la paleta de color con la regla de 60-30-10. El 60 se asignó a color blanco roto; el 30, a la madera y el 10, al color azul en varias tonalidades. Los muebles fueron personalizados y realizados expresamente para su proyecto.
Encargamos dos muebles simétricos a ambos lados de la chimenea de DM lacado en blanco mate, con baldas voladas en la parte superior. Esa pared fue empapelada para darle más presencia y profundidad al frontal completo.
El cuadro en tonos azules encima de la chimenea, crea un punto focal con gran personalidad. El resto de muebles, como la mesa de comedor, la mesa de centro y la mesa auxiliar, se fabricaron de roble tintado en un sutil gris y con patas en hierro negro mate.
La zona de comedor es el vivo reflejo de la elegancia. La lámpara de Inuk Home es de cuentas de madera tintadas en color blanco hueso; el espejo es de la Maison du Monde; las sillas de Miv Interiores tapizadas al completo (incluso las patas) y las láminas de Kkrogh están realizadas con una sucesión de puntos minúsculos en relieve de color dorado.
Para la zona de estar, hicimos un trabajo de los que nos apasionan, dar una segunda vida a unos sillones del siglo 19 que habían heredado. Los sillones fueron pintados en un tono gris muy sutil para conseguir que acompañen al tono de la madera elegida en el resto de muebles. Para el retapizado, nos decantamos por un textil de Ybarra y Serret. Una espiga atemporal y elegante donde el azul empieza a cobrar presencia en el conjunto.
Para el textil de los cojines elegimos telas de James Malone, donde los azules se mezclan con los verdes para crear colores más especiales. Las láminas ubicadas en esta zona son de Kenay Home y fueron enmarcadas en nuestra tienda de enmarcaciones de confianza, eligiendo cada marco a conciencia para dar al conjunto la perfecta armonía.
Los espejos son de La Roudete, imitan a un cristal envejecido y desgastado con el paso de los años, aportando así ese encanto de antaño. La alfombra es de yute natural y también es de la Roudete.
El resto de elementos decorativos fueron adquiridos en diferentes tiendas y, junto a los recuerdos familiares, conseguimos ese espíritu familiar que tanto anhelaban. Al fin, logramos convertir su casa en un hogar.
